Una vez que ya casi se toma como habitual una bodas civil, ya sea entre homo o heterosexuales, ahora ha nacido el bautizo laico. El Ayuntamiento de Madrid, del Popular Alberto Ruiz - Gallardón, se ha lanzado al charco, y no de agua bendita, precisamente.
El oficiante de la ceremonia, no es un párroco, tampoco sino Pedro Zerolo, concejal socialista, homosexual declarado y orgulloso de ello, e inventor de este nuevo ritual. Quizás debería ocuparse de buscar de otras maneras más efectivas, el bienestar de sus conciudadanos...
En la celebración del sacramento del bautismo tradicional, los gastos generados, son cubiertos por los padres y padrinos. Y en lo material, es sólo cuestión de acuerdo entre la parroquia y sus feligreses. En el caso de este nuevo invento civil, se cuenta con la inscripción del recién nacido en el Registro correspondiente, además de una ceremonia, con ocupación de instalaciones municipales, presencia de funcionarios y discurso de ediles, que costeamos entre todos los ciudadanos. Luego, hay que quitarle ayudas a la Iglesia...
El hijo de la actriz Cayetana Guillén, fue el afortunado protagonista de esta celebración, que, según Zerolo, no será la última, porque hay demanda de ellas. Además, reclama un registro oficial, para que este tipo de ceremonias, sean algo más que un mero símbolo.
Si de las bodas cristianas, se pasó a las bodas civiles, y de los bautizos cristianos, se ha pasado a los bautizos laicos, ¿Qué será lo próximo? ¿La confirmación laica? ¿La extremaunción laica? ¿La ordenación laca? ¿Por qué se banalizan las celebraciones de la Iglesia, imitándolas, pero poniendo tierra de por medio, para que quede bien clara la laicidad del acto?
sábado, 6 de junio de 2009
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